

Una victoria clave tras sufrimiento para el Atlético de Madrid ante el Royale Union Saint‑Gilloise

Esta noche quedará marcada en la memoria de la Champions League para el Atlético de Madrid. En el Estadio Metropolitano, el Atlético se impuso 3-1 al Union Saint-Gilloise en la cuarta jornada del grupo.
El conjunto colchonero no comenzó con la fluidez esperada: el equipo belga se mostró ordenado, propositivo y amenazante en los contraataques. A pesar de dominar la posesión, al Atlético le costó generar ocasiones claras durante gran parte de la primera mitad. El primer gol llegó justo antes del descanso: una galopada por la banda derecha del joven Giuliano Simeone, quien puso un excelente pase que aprovechó Julián Álvarez para batir al portero. n la segunda mitad, el Atlético incrementó su ritmo y encontró el segundo tanto gracias a Conor Gallagher, que tras una serie de rechaces fusiló la portería visitante. El Union-SG no se dio por vencido: en el minuto 81 recortaron distancias mediante un cabezazo de Ross Sykes, después de un buen centro desde una falta. Pero el Atlético cerró el partido en el tiempo de descuento con un gol de Marcos Llorente, que selló el 3-1 y la victoria que necesitaban.
Claves tácticas y de actuación
– El cambio de ritmo tras el descanso y la capacidad de concretar oportunidades marcaron la diferencias.
– La presión del Union SG obligó al Atlético a rectificar sobre la marcha, mostrando resiliencia.
– El joven Giuliano Simeone emergió como elemento clave, algo que ya se viene comentando en su club.
– El gol en el descuento de Llorente evidenció que el Atlético supo cerrar el partido cuando comenzaba a complicarse.
Implicaciones para el Atlético
Con esta victoria, el Atlético suma seis puntos tras cuatro jornadas en la fase de grupos, lo que le permite seguir vivo en su objetivo de clasificación hacia las rondas eliminatorias. Por otra parte, el Union SG, con tres puntos, queda en una situación más comprometida.
Aunque el rival no sea de los más poderosos históricamente, el hecho de que el Atlético sufriera y tuviera que reaccionar es una señal de que aún está lejos de su mejor versión. Sin embargo, la capacidad de ganar en una noche difícil puede tener efectos positivos en la moral del equipo y en la confianza para los próximos partidos europeos y domésticos.





