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Prohibición de comida chatarra en escuelas: un paso para combatir la obesidad infantil

2 min de lectura

El secretario de Educación Pública, Mario Delgado, ha defendido la nueva medida que prohíbe la venta de comida chatarra en las escuelas de México, como una respuesta a la creciente obesidad infantil.


Con México ocupando el primer lugar mundial en obesidad infantil y el segundo en adultos, esta decisión busca fomentar hábitos alimenticios saludables en la infancia, evitando productos altos en grasas y azúcares, y promoviendo el consumo de frutas, verduras y alimentos nutritivos.


¿Por qué es tan importante esta medida?


La obesidad infantil es uno de los problemas más serios de salud pública en el siglo XXI. Los niños con sobrepeso tienen un mayor riesgo de continuar con obesidad en su vida adulta, lo que los hace más propensos a desarrollar enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión a edades más tempranas. La venta de comida chatarra en las escuelas es uno de los factores que ha contribuido al alarmante aumento de este problema en México.


Recomendaciones para mejorar la nutrición infantil


Para combatir este problema, tanto las escuelas como los hogares deben tomar medidas activas. Algunas recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyen:


- Limitar el consumo de grasas y azúcares.


- Aumentar la ingesta de frutas, verduras y cereales integrales.


- Promover la actividad física con al menos 60 minutos de ejercicio diario.


Además, la lactancia materna es clave en los primeros meses de vida para prevenir el desarrollo de obesidad en la infancia, junto con la introducción de alimentos sólidos saludables a partir de los seis meses.


Cambiar hábitos, clave para el futuro


Esta iniciativa no solo pretende regular lo que se vende en las escuelas, sino generar una transformación en la cultura nutricional, para que tanto niños como sus familias adopten hábitos alimenticios más saludables. La lucha contra la obesidad infantil requiere un esfuerzo conjunto entre instituciones, familias y la comunidad en general.

 

Al prohibir los alimentos poco nutritivos y promover una mejor alimentación, México busca reducir los índices de obesidad y garantizar un futuro más saludable para sus niños y adolescentes.


Reacción de la industria


Esta medida ha generado cierta controversia, especialmente entre los productores de comida chatarra, quienes se verán afectados económicamente por la regulación. Sin embargo, Mario Delgado ha sido claro al señalar que la salud de los niños debe ser prioritaria frente a los intereses comerciales de la industria. La SEP cuenta con el respaldo legal para avanzar con esta iniciativa, amparada en la Ley General de Educación.

 

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